Fragmentos de
conversación
…vienen ustedes y nos hablan de cada cosa de nuestro país,
que de pronto quedo horrorizada de donde estoy viviendo.
Mire usted, yo estoy contenta y feliz porque siempre he
vivido aquí y no he conocido otras cosas. Es cierto, veo la televisión y alguna
vez he visto alguna película y veo cosas que son muy diferentes de las de aquí.
La verdad es que creo que aquello que veo es para mí como una fantasía. Como si
lo que viera fuera una película histórica o de ciencia ficción, algo que puede
ser o haya sido, pero no lo identifico con una realidad que pudiera tener.
Aquí vivo tranquila. Sé que hay problemas de todas clases,
pero me imagino que como en todas partes.
Con usted no es con el primer extranjero con el que hablo.
He hablado con muchos antes y más o menos muchos de ustedes se expresan de la
misma forma. Como si estuviéramos viviendo el apocalipsis diariamente. Creo que
es un problema más de ustedes que nuestro. Quizás tienen mala conciencia de
habernos explotado o robado, no sé. O quizás de estar viviendo un progreso que
no han sabido o querido compartir.
Nosotros los hemos conocido a ustedes desde siempre y,
créame, no sé si los odiamos ahora, pero lo hemos hecho durante generaciones.
Ahora vemos otras cosas y otras actitudes, pero creo que aún necesitamos ver
más. No solo a través de sus ojos, también de los nuestros. No solo viendo lo
que ustedes tienen, sino también lo que nosotros tenemos y somos, pensando que
también es valioso y con lo que nos podemos sentir orgullosos. Me niego a creer
que esto es el peor mundo posible.
Sí, claro que veo diferencias entre sus modos de vida y los
nuestros, pero soy incapaz de pensar si unos son mejores que los otros. Sé que
el mundo es distinto y que tengo ganas de ahorrar para conocer de primera mano
los mundos que hay en él. Quizás algún día se dé… Pero este es mi país, mi
gente y mi tierra, mi mar y mi cielo, y los amo.
Yo solo puedo hablar desde lo que siento. Menos desde lo que
pienso o sé. No he estudiado tanto. No analizo tanto las cosas. Tengo
necesidades más básicas. Sé que ahora tengo agua en casa, pero los años de ir a
por ella y traerla hasta acá en baldes sobre mi cabeza ni están tan lejos, ni
se olvidan. También traje los colchones a la casa sobre mi cabeza con mi hijo en
las espaldas sostenido por una capulana. Vaya por la calle y cuente cuantas
mujeres están caminando así y trabajando. No, no estamos en el campo, esto es
una pequeña ciudad. Es así todo. Tengo cuatro hijos, dos más mayores y dos que
todavía me necesitan. Trabajo y los cuido. Desde las 4 estoy levantada cada día
para atender a todo.
Quizás advierta que la gente sonríe, pero no todo el tiempo.
He conocido la serenidad de mujeres muy dañadas. Créame, este país, como el
mundo, lo salvaremos nosotras...
Cuanto respeto lleva este texto para los nativos mozambiqueños... He revivido mediante el mismo, mi estancia en Senegal, sugerir que no imponer cambios y costumbres, es muy complicado... Y hay que ser muy respetuoso ...
ResponderEliminarEste testimonio lleva mi mente al libro de Melanie Klein “Amor, culpa y reparación”. ¿Por qué? Creo que por el dolor que provoca, que no puede si no estar vinculado a la culpa. Melanie Klein decía en este libro: “Los sentimientos de culpa constituyen un incentivo fundamental para la creación y el trabajo en general, aun en sus formas más simples. No obstante, si son demasiado intensos tienen el efecto de inhibir las actividades e intereses productivos.” También Freud decía que debemos conocernos a nosotros mismos para no repetir continuamente las mismas conductas, para aprender a ser libres. ¿Ser libres para qué? Según el mismo Freud, para amar y trabajar.
ResponderEliminarQué sabiduría y qué realismo en medio de la obligada resignación a las condiciones de vida en las que nacemos y nos criamos de las se emerge casi nunca ¿Cuáles son las buenas?...Lo dirá cada individuo en su trajinar diario y en lo que su mente y su cuerpo le permitan ver. Buen reporte JL.
ResponderEliminarBravo x les paraules de la senhora!, te tota la rao, sens dubte, segur que tb te pensaments referits als politics (seus i d'abroad).
ResponderEliminarQuina cosa oi?, la naturalesa humana vull dir. Solidaritat, compassio, sentit de la justicia, pero també corrupcio i ambició.
Cooperacio: si o no? i on? i quan? i com?
Boa noite
Gracias por enriquecer y aportar nuevas visiones a estos fragmentos.
ResponderEliminarEstos comentarios me hacen ver la necesidad de estar constantemente atento a lo de dentro y a lo de afuera, simultáneamente, y que las transformaciones solo pueden darse si salen desde el interior de uno mismo y se unen, expuestas y dispuestas a ser confrontadas, con las de otros.
Este proceso es de una complejidad tan grande como la evolución del pensamiento, de la sociedad, de la ética, de la política, de la vida en definitiva...
Nadie dijo que esto iba a ser fácil... pero no dejemos de aportar el grano de arena.